viernes, 2 de junio de 2017

Militares en la revolución

Desde que Chávez tuvo la oportunidad, siendo él militar, no dejó de hablar de los militares. Recuerdo su sentencia, que en aquel momento me impactó y a la mayoría ni le estorbó. "la academia militar es formadora de líderes", los militares son líderes y por tanto superiores a los civiles. Son disciplinados, patriotas, educados y llamados por la providencia a solucionar los entuertos que los civiles hacen. Nada mas alejado de la realidad. Nada mas ver los resultados de la gestión militar en cualquier campo donde han tenido responsabilidad habla muy mal de la preparación de los mismos, sin que eso signifique que el cuerpo militar, en su conjunto, sea una masa de incapaces, ladrones y mediocres; pero de que hay muchos los hay. El resultado de la gestión militar en Venezuela es un desastre, tanto que se habla del cartel de los Soles, es decir, no solo ineptos sino corruptos y anti patriotas. Ni hablar de su subordinación a la revolución cubana.
No sólo es el disfrute en martirizar a manifestantes, es su cinismo a la hora de cumplir su deber, creen que pueden interpretar la constitución, dar clases de derechos humanos, pero, sobretodo, pretenden calificar quien es patriota y quien no.
Lo cierto es que puede la revolución mantenerse en el poder con el apoyo de los militares, asumiendo su accionar como un ejercito de ocupación donde los civiles de oposición son reos de las armas que nosotros mismos confiamos en dárselas. ¿de quién es culpa? ¿quién formó tan mal a esta gente? ¿quién no les enseñó sus deberes? ¿por qué son tan mediocres? ¿por qué tanta saña en sus actuaciones? ¿por qué tan corruptos? ¿por qué esa subordinación a Cuba? Todo el siglo XX estuvo plagado de intentos de golpes de Estado, de militares que siempre creyeron ser mejores que los civiles, de militares dizque subalternos al mando civil. La historia del 4 de febrero lo que habla es de los generales traicioneros, de los comacates oportunistas, pero, en definitiva, de gente sin valores democráticos y llenos de ambiciones.